Me hacen genocidio desde fuera de la biblioteca, en silencio, me entra una pregunta por el oído izquierdo y me resuena como si fuera mi voz y despues me encuentro pensando una respuesta que pone en peligro muy serio a seres que aprecio pero con los que no hablo.
Me
hacen genocidio en silencio desde fuera de la biblioteca, no desde de la calle sino desde dentro de mi oído, me entra una
pregunta por el oído izquierdo y me resuena como si fuera mi voz y
despues me encuentro pensando una respuesta que pone en peligro muy
serio a seres que aprecio pero con los que no hablo.
Los
de siempre, los hologramas Osiris y su madre, y alguno más como Daniel
pero esta vez un pobre hombre pero que está en el lado malo, me
molestan en biblioteca y me hacen daño. Alguien me ha habierto anoche
la bolsa que llevo en el bolsillo con alguna cosa importante para ir
mirando para robar o hacer desaparecer algo que yo llevo. La bolsa no se
ha caído ni ha salido de mi bolsillo en unos cuantos dias, no suelo
sacarlo, son las bromas amargas del vasca frutera, la mierda de siempre.
No hay comentarios:
Publicar un comentario